Un matrimonio inglés viaja a Italia para vender una villa que ha
heredado cerca de Nápoles. Al alejarse del ambiente londinense y
encontrarse en un paisaje y en un mundo ajenos, la pareja experimenta
sentimientos olvidados, como los celos y el resentimiento.
Una de las obras cumbres de su autor, en la que se propone una incisiva
disección de los sentimientos humanos coherentemente relacionados con su
contexto social y cultural. Se desarrolla dentro de una absoluta
racionalidad, aunque introduciendo con gran sabiduría el elemento de
misterio que siempre acaba modificando las conducta (Fotogramas).
“Es una pareja cuyo matrimonio es realmente una asociación de negocios: han formado una sociedad. En el momento en que vienen a Italia de vacaciones (…) se encuentran solos, el uno frente al otro y descubren que no se aman” (Roberto Rossellini).
Reparto: Ingrid Bergman, George Sanders, Maria Mauban.
Título español: Te querré siempre.
C.C. Baxter (Jack Lemmon) es un modesto pero ambicioso empleado de una
compañía de seguros de Manhattan. Está soltero y vive solo en un
discreto apartamento que presta ocasionalmente a sus superiores para sus
citas amorosas. Tiene la esperanza de que estos favores le sirvan para
mejorar su posición en la empresa. Pero la situación cambia cuando se
enamora de una ascensorista (Shirley MacLaine) que resulta ser la amante
de uno de los jefes que usan su apartamento (Fred MacMurray).
Lemmon es un tipo simple que presta su apartamento a los jefes para
poder ascender en la empresa. MacLaine es una guapa ascensorista liada
con el casado mandamás. Dos maravillosos personajes, dos almas
bondadosas y solitarias que nos regalan una impagable comedia llena de
sutileza corrosiva, sonrisas y ternura. Otra indiscutible obra maestra
del inigualable Billy Wilder. (Pablo Kurt)
"No conozco ninguna película tan romántica, realista, soñadora, triste,
mordaz, sensata, cabrona y bonita como ésta." (Carlos Boyero:
Diario El País).
"La obra maestra del genio Wilder" (Javier Ocaña: Cinemanía).
Wilder, una vez más, en estado de gracia dosificando lo hilarante y lo
corrosivo con un Lemmon inconmensurable como gris oficinista que entrega
una y otra vez su dignidad en forma de apartamento para que sus jefes
lo usen como casa de citas... Claro que Shirley MacLaine bien merece,
incluso para el más sumiso, rebelarse contra la tiranía (Rufo Pajares).
Posiblemente la obra maestra de su autor y una de las comedias más
ácidas de la historia, ilustra magistralmente la otra cara del sueño
americano. En este universo dominado por la mediocridad, el arribismo y
la humillación, la historia va ilustrando cada una de sus facetas menos
gratificantes. Wilder maneja todos los hilos con maestría, mostrando
tanto su sentido de la compasión como sus registros más brillantes (Fotogramas).
Reparto: Jack Lemmon, Shirley MacLaine, Fred MacMurray.
Título español: El apartamento.
Cortometrajes de animación, inspirados por los dibujos de los tejidos de las alfombras persas y producidos por Kanoon (centro ubicado en Teheran y que trabaja para el desarrollo intelectual de los jóvenes iraníes). La animación de estos films utiliza figuras dibujadas en tejidos e hilos cortados y bordados, así como papel recortado y dibujo y pintura sobre cristal.
Las tres cabritas (Shangoul and Mangoul, 2000). Farkhondeh Torabi y Morteza Ahadi Sarkani.
El pez irisado (The Rainbow Fish, 1998). Farkhondeh Torabi
Para poder escapar de un campo de concentración, una mujer desesperada
acepta casarse con un pescador de una pequeña isla llamada Stromboli.
Pero escapar de una prisión la lleva al final a meterse en otra, y su
vida en la isla es también una condena.
En su época, quizá influenciados por el escándalo del romance entre
Bergman y Rossellini, los críticos -en especial los americanos- fueron
muy duros con la película. En concreto el New York Times calificó la
película de "producto débil, inarticulado, falto de inspiración y
penosamente banal".
"Desgarrada obra maestra y apasionante retrato de las relaciones del
hombre con la naturaleza. Ahonda en el drama de una mujer oprimida por
su entorno y su soledad, con una angustia que la colma y amenaza con
desbordarse, al igual que la lava del volcán de la isla en la que se ve
obligada a vivir. El cineasta reinventa el realismo y lo convierte en
metáfora" (Miguel Ángel Palomo: Diario El País)
El primer film de Rossellini con Ingrid Bergman fue una reflexión sobre
la soledad humana: rodeada de un ambiente hostil, la protagonista
vivirá su aislamiento en una especie de comunión panteista con la
naturaleza. Film desmesurado y frustrado hasta cierto punto, combina la
simplicidad estilística con un intento de profundización introspectiva
que no acaba de cuajar. Pese a ello, no es un título desdeñable (Fotogramas).
“Es como si el cine de Rossellini, hasta Stromboli, esperara, sin saberlo, la llegada imprevisible de Ingrid Bergman para llegar al límite de ese descubrimiento del cine moderno como cine de lo heterogéneo” (Alain Bergala).
Reparto: Ingrid Bergman, Mario Vitale, Renzo Cesana.
Un famoso cantante, conocido por su reputación de conquistador, llega
con su lujoso coche a un tranquilo pueblecito llamado Clímax. Allí viven
dos amigos: un fracasado profesor de piano, casado con una bella mujer,
y el encargado de la gasolinera. Ambos creen que el artista puede ser
la oportunidad que estaban esperando para entrar en el mundo de la
canción.
"Una mordaz mirada al mito del sueño americano en la que el maestro
Wilder ofrece una vez más una clase magistral acerca de cómo crear una
comedia." (Miguel Ángel Palomo: Diario El País)
Incisivo viaje al fondo de la mediocridad cotidiana que toma como
pretexto una obra teatral de Anna Bonacci. Ambientado en un típico
pueblecito de la América profunda, ilustra un agudo juego entre un
humilde y celoso compositor, su esposa, un famoso cantante de paso y una
esposa suplente contratada para la ocasión. Al margen de su admirable
funcionamiento, cabe destacar una mirada tan corrosiva como compasiva (Fotogramas).
Reparto: Dean Martin, Kim Novak, Ray Walston.
Título español: Bésame, tonto.
En 1692, en la puritana ciudad de Salem (Massachussetts), un grupo de adolescentes desafían el puritanismo de sus padres y de la
sociedad de su tiempo participando a escondidas en extrañas reuniones
que les llevan siempre al trance y a la creencia en conjuros de todo
tipo. Son acusadas de practicar la brujería. Una de ellas, Abigail
Williams, procesada por esta razón, presenta a su vez cargos contra John
Proctor y su esposa Elizabeth para vengarse de ellos: cuando fue su
sirvienta tuvo una aventura con John, que acabó rechazándola para volver
con su mujer.
"Fiero retrato del histerismo colectivo: sus mecanismos son desnudados
hasta el desasosiego (...) Limpia puesta en escena y perfectas
interpretaciones" (Luis Martínez: Diario El País)
Historia de época -ambientada en la época de la América colonial- sobre
brujería y supersticiones, a la par que metáfora de la "caza de brujas"
del senador McCarthy de los años cincuenta, con guión escrito por Arthur
Miller basado en su propia obra de teatro.
Reparto: Daniel Day-Lewis, Winona Ryder, Paul Scofield.
Título español: El crisol.
Arián (Ingrid Rubio) es una joven de veintitantos años, de carácter
romántico e idealista, que se ha movido desde su infancia en ambientes
radicales vascos y participa activamente en la lucha callejera. A través
de Vivaldi (Abel Folk), un terrorista obsesionado por la música clásica
del que está enamorado, Arián comienza a integrarse en la organización
terrorista realizando tareas de información. Al resultar identificada
por la policía tras los incidentes que se producen después de una
manifestación, Arián tiene que abandonar su casa y refugiarse en el piso
franco en el que se esconde el comando. Se incorpora entonces al grupo
terrorista para participar en el secuestro de la hija de un conocido
industrial navarro. Arián abandona a sus padres, sus amigos, sus
estudios, su grupo de teatro... Y emprende un viaje que implica entrar
en un mundo sin retorno.
"En este recorrido que ella realiza, desde la agitación estudiantil en
el instituto hasta la clandestinidad en ETA (...) está lo mejor de la
película (...) Hay que saludar su presencia en nuestras pantallas,
aunque sólo sea porque ofrece la ocasión para una discusión no demasiado
maniquea sobre uno de los temas más lacerantes de cuantos nos afligen."
(M. Torreiro: Diario El País)
No deja de ser curioso que tanto el director como los intérpretes e
incluso uno de los guionistas de este film sean catalanes. Si esto llama
la atención es porque El viaje de Arián es una película arraigada en la
realidad de ahora mismo en Euskadi. Claro que a lo mejor es
precisamente por eso, por ser catalanes y no vascos, por lo que El viaje
de Arián es a la vez un film tan sincero, tan directo. Ninguno de los
implicados en su elaboración le debe nada a nadie. Son ajenos al
conflicto, no están obligados a tomar partido por unos o por otros.
Pueden contar la historia con una libertad de criterios que un director
de Euskadi difícilmente podría tener. Todos estos preámbulos sirven para
explicar lo que nos cuenta El viaje de Arián. Arián es una joven
idealista de 20 años que por amor a Vivaldi se ve envuelta en la espiral
de violencia de ETA. Arián empieza como activista de la kale borroka,
pero las circunstancias la van llevando hacia la clandestinidad y la
profesionalización dentro de un comando terrorista. Casi sin darse
cuenta, Arián pasa de quemar cajeros a la obligación de matar personas.
Lo que impresiona de este film, sin embargo, no es el argumento con el
que se podía haber hecho una película de cine político al estilo
Pontecorvo o un panfleto ideológico al estilo Ken Loach. Lo que
sorprende, y puede que eso se deba también a que los autores no están
involucrados personalmente en lo que cuentan, es el tono del film, más
una crónica que una epopeya, más una historia de amor que una denuncia.
En este viaje hacia la muerte no hay buenos ni malos, no se trata de
eso. Cada uno tiene sus razones para comportarse como lo hace, el film
no los juzga. Pero justamente por no juzgarlos es por lo que eso que
podríamos llamar el mensaje llega mucho más hondo. De todos modos, hay
un hecho que no se puede obviar. El film está escrito y realizado
durante los dos años de tregua de ETA. Dos años en los que hubo un
atisbo de esperanza de poder salir del agujero negro del terrorismo,
durante los cuales se tuvo el espejismo de poder acercarse al problema
de ETA de una forma más literaria. Probablemente ahora, tras un año de
atentados y miedo, un film como este se plantearía de forma muy
diferente. O simplemente no se plantearía, ya que la triste, inútil y
sin sentido historia de Arián podría ser la de cualquiera de los jóvenes
que estos días son protagonistas en los periódicos por sus asesinatos. (Fotogramas)
Sara lee por las noches un cuento al pequeño Víctor, sobre una afligida
princesa y un valiente príncipe. Poco a poco el cuento va acercándose a
sus vidas, hasta converger en un fatídico desenlace.
Es en “El Reino de Víctor” donde podemos intuir qué es lo que
iban a depararnos los largometrajes rodados con posterioridad por Ulloa. Vemos el interés del cineasta por contar cuentos
mediante una relectura perversa y macabra que se haría obvia en los futuros largometrajes “Alas de Mariposa” (1991) reformulando “La Cenicienta”; “La Madre Muerta” (1993) reformulando “Caperucita Roja”; y “Frágil” (2005) reformulando “El Patito Feo”.
Ulloa es un director que, más que utilizar los diálogos, prefiere
utilizar la imagen y el sonido para contar sus historias, apostando por
las atmósferas tétricas y con sombras que confieren a “El Reino de Víctor”
un ambiente de pesadilla adecuado para la narración, la cual se
beneficia además por una maestría a la hora de utilizar la cámara digna
de alabanza teniendo en cuenta que el director contaba con sólo 23 años
cuando rodó el mediometraje.
Premio Goya al mejor cortometraje en 1990.
Reparto: Javier Jiménez, Luisa Solaguren, Alberto Martín.
Leonora Eames ve colmada su ambición cuando se casa con el
multimillonario Smith Ohlrig, un hombre enfermo, neurótico y
autoritario. Pero el matrimonio fracasa, y la joven decide separarse. A
continuación, encuentra trabajo como secretaria de un médico idealista y
con una gran vocación. El marido, sin embargo, no está dispuesto a
renunciar a su mujer y trata por todos los medios de mantener su dominio
sobre ella.
"Completa e inteligente historia rodada por Ophüls que basó gran parte de
su efectividad en el magnífico trabajo de Ryan. Sobria producción,
rodada con un estilo depurado y un guión trabajado" (Fernando
Morales: Diario El País).
Un melodrama en el que Ophüls no llegó a la altura de su precedente
"Carta de una desconocida", pero en el que supo construir una
inteligente historia a partir de una vulgar novela de Libbie Block que
ilustra el viejo axioma de que el dinero no da la felicidad. Su
envolvente puesta en escena consigue una atmósfera que se va
enrareciendo progresiva y coherentemente. Film inédito en España.
“Como Almas desnudas, se trata de una casi obra maestra del melodrama negro, el género que mejor expresa la vida domestica americana de finales de los cuarenta. Habla de amor pero se centra en las ambiciones mórbidas y la ilusión de la ascensión social de la sociedad de posguerra” (Pacific Film Archive).
Reparto: James Mason, Barbara Bel Geddes, Robert Ryan.
Título español: Atrapados.
Joe Gillis es un joven escritor de segunda fila que, acosado por sus
acreedores, se refugia casualmente en la mansión de Norma Desmond,
antigua estrella del cine mudo, que vive fuera de la realidad,
acompañada únicamente de su fiel criado Max. A partir de ese momento, la
actriz pretende que Joe corrija un guión que ella ha escrito y que va a
significar su regreso al cine.
Obra maestra de Billy Wilder que retrata con venenosa ironía una crítica
a los propios excesos del mundo de Hollywood. El paso del tiempo, los
egos inmensos y el desesperado intento de recuperar el esplendor perdido
se concentran en la violenta e impresionante mirada de la Swanson.
Imprescindible.
Este film significó el fin de la colaboración entre Billy Wilder y
Charles Brackett, que se había iniciado cuando el primero llegó a
Hollywood. Plantea la tragedia de una antigua estrella que sueña
ilusamente con regresar al cine, y sus extrañas relaciones con un
guionista ambicioso y con pocos escrúpulos, bajo la inquietante mirada
de un chófer que resultará ser un antiguo director. Narrada en un tono
majestuoso y mortuorio, con inflexiones entre la ironía y la crueldad,
propone una incisiva mirada sobre el cine en particular y la vida en
general.
Reparto: William Holden, Gloria Swanson, Erich von Stroheim.
Título español: El crepúsculo de los dioses.
El colaborador y productor de las películas de Stanley Kubrick dirige este aplaudido filme con gran banda sonora de jazz. En esta versión del cuento de la bella durmiente, una mujer que ha dormido durante ocho años es comprada en una feria por un solitario músico de jazz. Cuando la despierta descubre que ella no comparte su visión idealista del amor.
El film fue tan bien recibidio en Europa, después de numerosos pases ante la prensa y los distribuidores, que el director James B. Harris fue invitado a la prestigiosa Quincena de los Realizadores en el Festival de Cannes de 1973 para presentar la película. En Europa, Some Call It Loving fue recibida con los brazos abiertos y saludada como un drama ingenioso. En los Estados Unidos, los críticos no fueron tan amables, tachando al film de ser una rareza curiosa. La película desapareció rápidamente de las pantallas debido a los comentarios negativos y a la falta de cines que la estrenasen. Desde su estreno en los Estados Unidos, sin embargo, se ha ganado una respetable fama de film de culto.
Reparto: Zalman King, Carol White, Tisa Farrow, Richard Pryor.
Título español: La bella durmiente.
Un importante financiero estadounidense, Charles Foster Kane, dueño de
una importante cadena de periódicos, de una red de emisoras, de dos
sindicatos y de una inimaginable colección de obras de arte, muere en
Xanadú, su fabuloso castillo de estilo oriental. La última palabra que
pronuncia antes de expirar, ”Rosebud”, cuyo significado es un enigma,
despierta una enorme curiosidad tanto en la prensa como entre la
población. Así las cosas, un grupo de periodistas emprende una
investigación para desentrañar el misterio.
Plena guerra en Europa, los japonenes a punto de atacar Pearl Harbor... y
mientras tanto un primerizo llamado Orson Welles revoluciona el cine
con una descomunal exhibicion de talento. Sentenciada como la película
que marca un antes y un después en la historia del séptimo arte, la
"number one" en todas las listas de los críticos de las últimas décadas,
"Citizen Kane" es una obra de arte de un poder insultante, una película
magistral realizada por un joven prodigio de sólo 26 años de edad, que
inventa con insólita personalidad -y de golpe- varios conceptos
cinematográficos de primer orden. Insistiendo en que hoy está
indiscutiblemente considerada como la mejor película de todos los
tiempos, el caso es que en su día ni obtuvo un gran éxito de público ni
se llevó los premios que, quizá, la juventud y poca modestia de su
director le privaron de conseguir (el film obtuvo 1 Oscar al guión de 9
nominaciones), aunque bien es cierto que ese año compitió con directores
consagrados de la talla de John Ford, Howard Hawks o William Wyler,
nada menos. Sin duda alguna, palabras mayores del firmamento del cine (Pablo Kurt).
Esta es la opera prima más atípica de la historia del cine, tal es su
madurez expresiva. La biografía encubierta del magnate de la prensa
William Randolph Hearst fue el pretexto que utilizó Welles para realizar
la radiografía moral no sólo de un personaje sino también de una
sociedad y una época. Su profunda complejidad y la perfección de su
alambicada composición formal la convierten en una indiscutible obra
maestra.
Reparto: Orson Welles, Joseph Cotten, Everett Sloane.
Título español: Ciudadano Kane.
Jabez Stone es un laborioso granjero que intenta ganarse la vida
honestamente. Sin embargo, una racha de mala suerte le impulsa a cometer
lo inimaginable: hacer un trato con el mismísimo Demonio. A cambio de
siete años de buena fortuna, Stone promete su alma al "Señor Scratch".
Cuando el atribulado granjero se da cuenta de su error, busca la ayuda
de un hombre que puede salvarle: el legendario orador y político Daniel
Webster.
Adaptación de un conocido relato de Stephen Vincent Bennet en el que la disputa por el alma de un granjero sirve para hacer un balance de la historia americana y un alegato por la intervención en la lucha antifascista.
Reparto: Edward Arnold, Jane Darwell, Walter Huston.
Título español: El hombre que vendió su alma.
Las películas de Arnod son secuencias intensamente montadas en las cuales se toman varios segundos de metraje y se expanden en obras mucho más largas. Las figuras en la pantalla van hacia atrás y hacia delante, mientras se repite el movimiento, invertido, y se hacen numerosos cortes de un solo cuadro. Su intento es crear, o posiblemente desenterrar, narraciones ocultas en películas triviales de las que toma las muestras.
Su primer proyecto montado digitalmente es Alone: Life Wastes Andy Hardy, que hace uso de metraje del actor Mickey Rooney en el personaje de Andy Hardy, tomado de una popular serie de películas.
"El héroe de Instructions for a Light and Sound Machine es fácil de identificar. Caminando por la calle, de repente se da cuenta de que no sólo es sujeto de los horripilantes humores de varios espectadores sino que también está a la merced del cineasta. Se defiende heróicamente, pero es condenado a la horca, donde muere una muerte fílmica con el rasgado del propio celuloide. Nuestro héroe desciende al Hades, el reino de las sombras. Allí, en las profundidades de la cinematografía, se encuentra con innumerables instrucciones de impresión, los medios por los cuales cada imagen fílmica se hace posible. En otras palabras, nuestro héroe encuentra las condiciones de su propia posibilidad, las condiciones de su misma existencia como una sombrea fílmica. Instructions for a Light and Sound Machine es un intento de transformar un 'western romano' en una tragedia griega." (Peter Tscherkavssky).
Salva trabaja como guarda jurado en un poligóno industrial del extrarradio de Madrid. Allí conoce a Leo, una chica que se gana la vida recogiendo cartones. Poco a poco Salva se va enamorando de la joven, pero la vida de Leo encierra un turbio pasado.
Desde la primera escena, nada de lo que ocurre en "Leo" es lo que parece. Abrumados por un pasado del que no pueden desprenderse o impulsados por una pasión que los constriñe a apartarse de la rutina cotidiana, los personajes de la última película de José Luis Borau ilustran los lugares más recónditos del espíritu humano. El azar provoca la coincidencia entre la muchacha que recoge cartones en las calles de un polígono industrial y el vigilante de seguridad que patrulla la zona, pero, a partir de ese encuentro fortuito, es el destino quien mueve los hilos de esos seres desesperados, mezquinos y, a la vez, ambiciosos. Su suerte, sin embargo, está escrita en sus propias trayectorias, en el afán que los lleva a traspasar todas las normas hasta acceder a un mundo situado más allá de la realidad, atrapados en los pasillos del metro o bailando sin que oigan la música. Herederos del inflexible juego que Fritz Lang practicaba con la venganza, la culpa o la traición, los personajes de "Leo" rehúyen cualquier posible identificación por parte del espectador. Desde el principio del film, se toman o se dejan tal como son, pero, en el primer caso, hay que estar curtidos y atentos para acompañarlos a través de un periplo sin concesiones. Un guión impecable, donde la acción progresa a través del tiempo sin necesidad de recurrir a flashbacks, y una planificación tan aparentemente sobria como repleta de sutiles detalles plenos de significaciones marcan la senda que Borau impone. El trayecto es arduo y doloroso porque nunca hay nada superfluo, ni tampoco se abre la más mínima perspectiva de optimismo en un universo demoledoramente nihilista. Borau repite en Leo la colaboración con Icíar Bollaín que ambos habían emprendido ya en "Niño Nadie", y el trabajo de la actriz es espléndido. Igualmente notables resultan las aportaciones de Luis Tosar y del debutante Javier Batanero, pero no es este un film que repose exclusivamente en los matices psicológicos aportados por los actores. A pesar de jugar con abstracciones éticas, casi filosóficas, Leo también incluye entre sus protagonistas la concreción de un paisaje apocalíptico ubicado en una periferia urbana habitada por inmigrantes, talleres clandestinos, disminuidos psíquicos y marginados sociales que luchan por sobrevivir. Y, desde ese insólito retrato social, resulta lícito preguntarse si Leo es una película que va a contracorriente del cine español o es éste quien da la espalda a la realidad que lo circunda. Para recordar que el cine puede ser casi tan contundente como la vida.
Reparto: Icíar Bollaín, Javier Batanero, Luis Tosar.
"Un film sobre el agotamiento extremo que provoca la soledad, la agresión y el amor, y un inventario de la realidad postsoviética" (Sharunas Bartas). El film tiene como protagonistas a los melancólicos habitantes de un decadente bloque de apartamentos de Vilnius. El film es un collage asociativo de fragmentos de recuerdos y experiencias, y cambios de sucesos. "La lógica de la narrativa modela la poesía de la pérdida, el duelo, el deseo y la fe renovada. Bartas utiliza un estilo narrativo tan evocador, tan meditativo, tan minimalista, que te hace pensar que el espíritu de Dreyer planea encima suyo. El film es un retrato notable del estado de ánimo después de la ruptura de la Unión Soviética" (Jonas Mekas). "Extraordinaria. Ganadora de los premios de la crítica en los festivales de Turín, Tesalónica y Viena. Koridorius es un film desafiante y extraordinariamente poético del mejor cineasta lituano" (Tom McSorley).
Reparto: Katerina Golubeva, Sharunas Bartas, Viacheslav Amirhanian.
Título español: El pasadizo.
Cortometraje que pertenece al film Visions of Europe, en el que 25 directores de los estados miembros de la Unión Europea realizan cada uno de ellos un episodio de cinco minutos y donde encontramos nombres ilustres como el de Béla Tarr, Aki Kaurismäki, Jan Troell, Tony Gatlif o Peter Greenaway; el corto español -Nuestros niños- lo dirige Miguel Hermoso. En el corto lituano, dirigido por Bartas, un frágil barco de papel bordea metafóricamente una cascada luchando contra la corriente para mantenerse en la superficie.
Reparto: Ina-Marija Bartare, Aleksas Jermolenko, Adele Markauskiene.
Título español: Los niños no pierden nada.
Una chica llega en helicóptero a una aldea remota de Siberia habitada por los tofalares -un pueblo nómada de Asia obligado a establecerse en esta tierra árida a principios del siglo XX- y alejada del mundo moderno, para pasar unos días entre estos campesinos silenciosos, el espíritu nómada de los cuales parece estar congelado en su mirada fija y más bien melancólica. No hay diálogos, y sólo se oye correr el agua y el rumor del viento. "Describir este film es como intentar describir los films de Tarkovski o Godard. No se pueden describir, son poemas cinemáticos, van más allá de las palabras. Lo mejor es escribir lo mínimo sobre ellos. Es cine verdadero. No es sólo la historia, sino cómo explicarla. Bartas deja a los intérpretes comunicarse con su sola presencia, con los ojos, fumando un cigarrillo. No necesitan palabras (Paulo Branco).
Reparto: Katerina Golubeva, Piotr Kishteev, Sergei Tulayev.
Título español: Pocos de nosotros.
Como miles de neoyorkinos, Richard Sherman (Tom Ewell) se ha quedado
trabajando en agosto mientras su mujer e hijos disfrutan de unas gratas
vacaciones en la playa. Siguiendo las recomendaciones de su esposa, está
dispuesto a dejar de fumar, de beber, a acostarse pronto y sobre todo a
no echar una cana al aire. Pero la tentación aparece cuando conoce a
una despampanente vecina (Marilyn Monroe), tan sexy como ingenua.
"Una de las mejores comedias del séptimo arte. (...) Obra maestra que
encierra, entre otras muchas bondades, unos magníficos diálogos"
(Fernando Morales: Diario El País.
Reparto: Tom Ewell, Marilyn Monroe, Oskar Homolka.
Título español: La tentación vive arriba.
Franz se dedica a copiar cuadros de maestros antiguos y poco a poco pierde el sentido de la
realidad, sufre angustias imaginarias y se encamina a la autodestrucción.
Reparto: Ulrich Tukur, Julia Filimonow, Johannes Silberschneider.
Copy Shop es un cortometraje de poco más de 11 minutos de Virgil Widrich que
le valió la nominación al Oscar en 2002 y con el que se dio a conocer
internacionalmente tras la buena acogida por la crítica. Cuenta la
historia de un hombre empleado en una tienda de reprografía que,
accidentalmente, hace un día una copia de su propia mano. Un simple
error que conduce a que la fotocopiadora cobre vida propia y comience a
crear de forma descontrolada copias de su propia persona, generando un
caos a menudo divertido pero con implicaciones más profundas.
Además de una historia ingeniosa, el
cortometraje posee unos increíbles efectos visuales logrados con un
trabajo minucioso que duró 8 meses. Fueron 18.000 fotogramas rodados en
video digital que posteriormente fotocopió y manipuló para crear los
efectos visuales y volvió a filmar uno a uno con una cámara de 35 mm. Un
trabajo experimental, pero con un resultado excelente.
Reparto: Johannes Silberschneider, Elisabeth Ebner-Haid.
Fidel, un minero asturiano, tras el cierre de la mina en la que trabaja,
decide echarse la familia a cuestas e ir caminando hasta Madrid para
exigirle al Rey el cumplimiento de uno de los principales derechos que
la Constitución reconoce a los españoles: el derecho a un trabajo digno.
Quirós enarbola un reivindicativo discurso cargado de razones, presto a
concitar nuestras simpatías. Inteligente, no se detiene en el
manifiesto, en la ortografía de una pancarta: lanza a esa familia en
paro forzoso, prejubilados del progreso, a la carretera, a un iniciático
tránsito por la picaresca hispana (los individuos que se cruzan en su
camino no han evolucionado comparados con muchos de los parásitos que
acompañaron a Lázaro de Tormes o Guzmán de Alfarache), un guiñol en el
que todos reciben su coscorrón, y un casco de propina. Es de quitarse el
sombrero ver que el personaje de Resines no es cien por cien simpático,
que puede ser ignorante, insolidario y racista como cualquiera. Al
tratarlo así el director y sus colaboradores en la historia, apoyándose
en la carcajada, demuestran una sinceridad ejemplar, una efectividad de
órdago que queda inmejorablemente resumida en los cínicos minutos
finales donde se destapa el destino del minero y sus compañeros tras la
mediática y mediatizada hazaña real.
Reparto: Antonio Resines, Adriana Ozores, Jesús Bonilla.
Nordrand habla de la vida en los márgenes de la sociedad y reconoce que
Austria se ha transformado en un crisol de razas por primera vez desde
los años 30.
Viena, 1995. Jasmin, Tamara, Valentin, Senad y Roman viven cerca de la frontera norte de Austria. Sus vidas se entremezclan y se separan repetidamente. Los personajes son jóvenes inmigrantes de la antigua Yugoslavia, Rumanía, Polonia y la misma Austria. Extraños en una tierra extraña, tienen un sentimiento de pérdida en su nuevo y temporal ambiente. Los cinco se conocen y se acercan, agarrándose sin esperanza a amistades y relaciones sin futuro. Frecuentan cafés y estaciones de tren soñando con un mañana mejor. A menudo recurren a la esperanza de un afecto a corto plazo en otro encuentro romántico o sexual. Intentando duramente suprimir los recuerdos de la guerra y de la alienación, tratan de encontrar fuerza moral y calor los unos en los otros.
Reparto: Nina Proll, Edita Malovcic, Astrit Alihajdaraj.
Título español: Extremo norte.
En 1659, el inglés Robinson Crusoe, el único sobreviviente de un
naufragio, llega a una isla desierta. Tras varios años de soledad,
descubre que la isla está habitada por salvajes. Tras enfrentarse con
ellos, salva a un nativo a quien le pone el nombre de Viernes. Juntos
vivirán en la isla algunos años más hasta que aparecen otros náufragos.
Uno de los films menos divulgados de su director, quien siempre lo
consideró como un simple e impersonal encargo. Sin embargo, la
adaptación de la famosa novela de Daniel Defoe estaba planteada desde
una perspectiva poco respetuosa con el texto, ya que eludía la mítica
voluntarista que tradicionalmente ha generado. Propone una lectura que
transgrede la original consideración de la soledad, abordada desde una
mirada inequívocamente buñueliana.
“Sobre un tema clásico, Buñuel hace una ampia reflexión sobre el silencio de Dios y la fraternidad humana. Añade también unos toques de sexualidad. El Pathécolor crea un clima a menudo onírico” (Jean Tulard).
Reparto: Dan O'Herlihy, Jaime Fernández, Felipe de Alba.
Dos chicos viajan desde su pueblo lituano hasta Kaliningrado, la antigua y prusiana Königsberg, donde nació Kant. Ahora es una ciudad medio derruida y dominada por un paisaje industrial gris. Allí conocen a una chica con quien pasan tres días, pasean por la ciudad, deambulan por los alrededores, buscan infructuosamente un lugar para hacer el amor en el puerto y después se separan. Con mucha dificultad intercambian unas pocas frases insustanciales y su lenguaje corporal tampoco nos revela demasiado de ellos. "El primer brillante largometraje de Bartas fue una de las revelaciones del Festival de Berlín de 1992. Es un film claramente influenciado por Antonioni y Tarkovski, pero con sus 27 años Bartas impone con éxito su propia visión en este cuento de comunicación frustrada y amor decepcionado" (Peter Scarlet).
Reparto: Katerina Golubeva, Rima Latypova, Arunas Sakalauskas, Audrius Stonys.
Título español: Tres días.
El film, realizado simbólicamente cuando Lituania obtuvo la independencia, es una sinfonía urbana magistral de la ciudad de Vilnius y la antesala de Tres días (1991). Bartas está completamente afectado por la situación desesperada y el eterno período de inactividad de este rincón olvidado del planeta. "La ciudad siempre me ha atraído. A veces parece que sea una creación de la naturaleza, que alguna fuerza invisible empuja a montones de gente dentro de esta enorme criatura viviente. En ningún otro lugar el hombre se siente tan solo como en la ciudad. Y en ningún otro lugar se mete tan de cabeza con esa alegría imprudente" (Sharunas Bartas).
Una oda contemplativa al hogar. El hogar como centro de la rutina diaria y como marco de las relaciones humanas. El hogar con todas sus idas y venidas. El hogar como centro de uniones y separaciones. El hogar como centro vital, como testimoni silencioso de las peripecias existenciales de sus habitantes, de las bodas, los funerales, los incendios. Cada individuo pasa, permanece allí o deja el hogar, y cada habitación tiene su propio papel.
Reparto: Valeria Bruni Tedeschi, Leos Carax, Micaela Cardoso, Alex Descas.
Título español: La casa.
Testimonios de antiguos soldados de la Wehrmacht con motivo de una exposición itinerante sobre los crímenes de la Segunda Guerra Mundial. Azulejos blancos,habitaciones, luces fluorescentes enlasparedes,fotografíasen blanco y negrode laexposición Destrucción de la guerra sobre los crímenesde la Wehrmachten el frente oriental. En este contexto,RuthBeckermann y el cámara PeterRöhsler nos presentanentrevistas conex soldadosque narran susexperiencias y aventurasmás allá de laguerra "normal". En una mezcla deimpotencia, vergüenza, oportunismo e intoleranciaininterrumpidahablanlos testigossobre aquel tiempode crímenes, como el fusilamiento de prisionerosde guerra rusos, el asesinato de los judíosy elmaltrato a las mujeres. Las diferentes versionesde los hechos muestran cómola percepción selectiva, incluso en el medio ambiente, era cruel. Esta películano es sólo ladestrucción del mitodel ejércitoinocente, sino que ilumina la puesta en marchade la república alemana y hace undiagnóstico del presente. Las imágenes de laguerra rara vezsurgentan vívidamente comoen los documentos históricoso escenas presentadas.
En un emblemático barrio popular de Barcelona, amenazado por un plan de
reforma, se emprende la construcción de un bloque de viviendas.
Queríamos conocer la intimidad de una construcción, así que nos metimos
ahí, cuando ese espacio era todavía un solar donde los chavales jugaban a
fútbol. Sobre este terreno buscamos la forma de convivir, conocer y
rodar -así, por este orden- que nos permitiera abordar tanto el
anecdotario de la propia obra como el que ésta generaba a su alrededor;
en esa cotidianidad quebrada por el estruendo de los derribos, entre sus
vecinos, en el barrio (de hecho la imagen del barrio se concretó en la
del puñado de rostros que a nuestros ojos lo representaban). En este
proceso, pronto advertimos que la mutación del paisaje urbano implicaba
también una mutación en el paisaje humano, y que en este movimiento se
podrían reconocer ciertos ecos del mundo. Sobre estos cimientos
construimos una película (José Luis Guerín).
Desde luego hay que alabarlo, y se puede afirmar que es un documental
que alcanza la excelencia en la dirección, una apuesta inteligente y
arriesgada del cine español que hace un hermoso homenaje a la
cotidianeidad de los personajes más comunes, pero que levante la mano
aquél que no pensó que era un "pelín" larga. No es que haya que quitarle
mérito alguno a este brillante documento, tan sólo lo decimos porque el
director, no contento con su gran éxito en taquilla y su cosecha de
premios, se resistía a admitir que le sobraba siquiera un solo plano...
En cualquier caso, un magnífico documental.
"Una de las más interesantes, arriesgadas y personales películas
españolas de los últimos años. Lo mejor de uno de los más raros y
necesarios directores españoles" (Javier Rioyo: Cinemanía)
"Una azaña poética e intelectual que seguirá estando viva y seguirá
siendo cine vigente dentro de décadas y más décadas... Tiene algo de
muestra antológica, de mágica exhibición de recursos de expresividad
musical casi en los bordes de lo insuperable" (Ángel Fdez.
Santos: Diario El País)
"Admirable película" (Carlos Boyero: Diario El Mundo)
En la que algunos consideramos la más programática, arriesgada de sus
películas, "El sol del membrillo", el gran Víctor Erice situaba
modestamente su cámara para captar un esfuerzo artístico, el del pintor
Antonio López y su denodada búsqueda del realismo pictórico frente a un
membrillero. Más discreto, pero no menos ambicioso, Guerin sitúa la suya
en el corazón de uno de los barrios históricos de la vieja Barcelona,
el Chino, para documentar igualmente un esfuerzo. No artístico, cierto,
pero no menos importante para la vida: el de unos hombres, los trabajos y
los días de un grupo de obreros, pero también las voces y las
presencias de los habitantes de una ciudad en constante, imparable
mutación.Hay en los dos esfuerzos, el de Erice, entonces, y el de
Guerin, ahora, una insobornable certeza: en un mundo cacofónico, en el
que las imágenes ya no dicen más allá de su palmaria evidencia, es
preciso oír otras voces, convocar otras presencias. Y hacerlo con otras
herramientas del narrar. Desconfianza ante las historias creadas desde
un guión; pero también, por qué no, voluntad de desandar el camino que
más de 100 años y muchos millones de horas de ficción después, parece
haber desembocado sólo en una de las múltiples posibilidades de la
imagen en movimiento, el puro y duro entretenimiento.Tiene por lo tanto
"En construcción", como tenían las anteriores "Innisfree" y "Tren de
sombras" y, claro, "El sol del membrillo", el valor de una declaración
de principios. Y también de amor: por una ciudad, por unos ciudadanos
que habitualmente no interesan a nuestros contemporáneos artistas. Solo
por eso ya merecerían Guerin y su film el mayor de los respetos. Pero es
que hay más: hay la belleza de lo ordinario captada sin florituras, la
voluntad de construir un discurso también sobre el cine, el de cuando
existía como tal, y no en forma de películas aisladas. También aquí se
ve el influjo bienhechor de Erice; y en otros homenajes explícitos: el
encofrador y el ferrallista cantando una canción de otro tiempo, como
López y Enrique Gran en "El sol..." , en la discusión de esa "Tierra de
faraones" que afana a varios personajes. Cierto: Guerin vuelve a
mostrar aquí una falta de mesura que daña inútilmente el resultado
final. Pero hay que agradecerle que nos vuelva a descubrir que el mejor
cine siempre es posible; y que es condición fundamental del creador el
compromiso sin claudicaciones con sus propias convicciones sobre el
medio. Para espectadores de hoy y de mañana. LO MEJOR: el
sentido del humor captado de sus anónimas criaturas. LO PEOR: un
estiramiento innecesario de bastantes situaciones (Mirito Torreiro. Fotogramas).
Reparto: Juana Rodríguez, Iván Guzmán, Juan López López.
En una ciudad de provincias, Mario, un mediocre oficinista que vive en
una modesta pensión, conoce una noche a la joven Natalia, en cuyo rostro
se refleja un profunda tristeza. Le da conversación para animarla y
ella le explica cómo cambió su vida, gris y aburrida, cuando conoció a
un apuesto forastero del que se enamoró y cuyo regreso espera cada
noche. Durante cuatro noches mágicas, Mario, enamorado de Natalia,
alberga la esperanza de sustituir en su corazón al misterioso forastero.
Adaptación cinematográfica de la novela de Dostoievski premiada en el
Festival de Venecia con el León de Plata.
Adaptación de una novela de Fedor Dostoievski, en la que Visconti adoptó
un tono narrativo abiertamente romántico para desarrollar una historia
sobre la intensidad y la fugacidad de los sentimientos. A través de
una atmósfera un tanto irreal, se propone un juego de encuentros y
desencuentros amorosos con un regusto tan amargo como lúcido.
“Visconti consigue crear de manera artificial un clima extraño, de una infinita suavidad y ternura que se esfuma en un desenlace especialmente cruel” (Jean Tulard).
Reparto: Maria Schell, Marcello Mastroianni, Jean Marais.
Título español: Noches blancas.
La acción ocurre en Lituania, Polonia y al sur de la antigua Unión Soviética, en Crimea. Mila, una muchacha, se una a una banda de malhechores que viven de pequeños trabajos y pequeños delitos. Todos tienen en común que son hostiles a la sociedad. Tienen sus propias razones, ya que todos han sido víctimas de la incomprensión y la marginalidad. Uno de ellos huye de la ley, otro escapa de sí mismo. Este viaje los llevará inevitablemente a un conflicto con el mundo, ya que, al fin y al cabo, nada puede ser cambiado ni reconstruido según sus deseos. "Bartas se pierde con divina pasión sobre los cuerpos, los rostros y las miradas con una cámara que, sin duda, lo convierte en uno de los grandes retratistas del cine moderno, un auténtico Rembrandt, que, en Siete hombre invisibles, ha dibujado unos personajes que parece que quieran escaparse de la tela" (Olivier Séguret).
Reparto: Dmitrij Podnozov, Rita Klein, Aleksandre Saulov.
Título español: Siete hombres invisibles.
Desde su creación en 1984 en Valence (Francia), los estudios Folimage no han parado de crecer en prestigio y medios de producción, que han dado como resultado una obra coherente y sólida, avalada por más de doscientos premios.
Michaël Dudok de Wit: Le moine et le poisson (1994)