martes, 22 de mayo de 2018

Rear Window (1954). Alfred Hitchcock


Un reportero fotográfico (Stewart) se ve obligado a permanecer en reposo con una pierna escayolada. A pesar de la compañía de su novia (Kelly) y de su enfermera (Ritter), procura escapar al tedio observando desde la ventana de su apartamento con unos prismáticos lo que ocurre en las viviendas de enfrente. Debido a una serie de extrañas circunstancias empieza a sospechar de un vecino cuya mujer ha desaparecido.

La ventana del apartamento es una segunda pantalla de cine en la que el Jeff ejerce como espectador (y, como todo espectador, tiene una marcada actitud de voyeur) de las distintas historias que se le presentan, fragmentadas y simultáneas (modernidad absoluta), en los pisos de sus vecinos. Hasta que una de ellas, la perteneciente al género predilecto del maestro, la criminal, se cuela en su mente y él, el pobre Jeff, empieza a no ser capaz de diferenciar entre ficción y realidad, invención y asesinato. Una de las películas más bonitas (y, a su modo, oscura) sobre el cine que se pueden haber concebido.(Diana Albizu en Sensacine)

Una obra maestra por la que no ha pasado ni un ápice de tiempo, poderoso juego cinematográfico con un crescendo dramático tan conseguido que sus momentos de tensión —el plano antes comentado o el clímax del relato— funcionan a la perfección siempre. Y un plano final que particularmente me parece glorioso. Lisa cambiando su libro de viajes por una revista de moda cuando Jeff, escayolado de dos piernas, se queda dormido. La verdadera belleza y el poder son femeninos. (Alberto Abuín en Espinof)

"Hay principios de películas –escribe José María Latorre– que marcan indeleblemente, y la obra de Alfred Hitchcock es pródiga en tales principios. Quizá el de La ventana indiscreta sea uno de los más memorables. Estamos ante un ventanal de tres cuerpos provistos de sus correspondientes persianas. Durante los títulos de crédito, cada una de las persianas va subiendo lentamente, una después de otra, hasta mostrar la fachada interior de un edificio, con sus ventanas y balcones. La cámara se aproxima despacio al cuerpo central de la ventana y hace un primer recorrido superficial por el patio de la comunidad que termina con un primer plano de Jeff (James Stewart) dormido y sudoroso. Sigue un inserto del termómetro indicando que la temperatura es, en efecto, elevadísima. (...) Sin una sola palabra de diálogo, Hitchcock nos ha dado ya muchos datos sobre el personaje, así como sobre la comunidad en la que vive".

 La tensa narración hitchcockiana con una puesta en escena en un reducido espacio, la magnífica utilización del tempo como expositor de la situación de suspense o la brillante fotografía de Robert Burks hacen de este título uno de los mejores trabajos del autor inglés. (AlohaCriticón)

"Impecable realización (...) Toda una lección cinematográfica." (Fernando Morales: Diario El País)

"Este nivel de peligro y suspense está tan por encima de las emociones baratas del slasher moderno que 'La ventana indiscreta', prevista como entretenimiento en 1954, se revela ahora como arte." (Roger Ebert)

"Un ejercicio tenso y emocionante (...) expone muchas facetas de la soledad de la vida de ciudad y tácitamente demuestra el impulso por la curiosidad morbosa."  (Bosley Crowther: The New York Times)

Es una obra impresionante. La ventana indiscreta es sin duda la película más exquisitamente artesanal de su autor, porque Hitchcock domina las coordenadas espaciales y de comportamiento de su universo elegido pulgada a pulgada. (Jonathan Rosenbaum)

En verdad, La ventana indiscreta presenta un centro inmediato de interés: (...) que es en sí mismo suficiente para hacerla encajar en la categoría de las obras serias, más allá del mero entretenimiento policial. (Claude Chabrol en Cahiers du Cinéma)

Nada de nuevo. Los héroes, siempre iguales, son igualmente repulsivos, y sus situaciones, siempre las mismas, son perpetuamente dudosas. (Louis Seguin en Positif)

Adaptación de un relato de Cornell Woolrich, convertido en un apasionante ejercicio que toma la mirada como constante referencia. Con talante de "voyeur", Hitchcock articuló una historia cuyo protagonista es el simple testigo de una realidad más o menos cercana. Al margen de su mecánica, milimetrada hasta la perfección, reflexiona sobre su propia condición. (Fotogramas)

Película estrenada en España el 5 de octubre de 1955.

Título español: La ventana indiscreta.

Reparto: James Stewart, Grace Kelly, Wendell Corey, Thelma Ritter, Raymond Burr.



viernes, 18 de mayo de 2018

Paycheck (2003). John Woo


Michael Jennings (Ben Affleck) es un ingeniero brillante y muy bien pagado que realiza importantes proyectos para una empresa de alta tecnología. Cada vez que termina un trabajo se lo borran de la memoria para que no pueda divulgarlo. Jennings espera ganar 90 millones de dólares por su último proyecto, en el que ha invertido tres años de trabajo. Sin embargo, en esta ocasión ni siquiera le pagan, aunque vuelven a borrarle la memoria. Con la ayuda de su compañera y amante Rachel (Uma Thurman), tratará de averiguar qué ha sucedido durante todo ese tiempo del que no recuerda nada.

"Hay que reconocerle la limpieza de su ejecución, un vehículo para pasar un buen rato con una acción sin pausas (...) Es directa como un puñetazo, elegante como todas las de Woo, y también, en ocasiones, un poco pasada de rosca. Es una recomendación segura para los amantes del cine de aventuras." (M. Torreiro: Diario El País)
 
"El filme es de acción casi a secas y se le ha añadido un toque intelectual que puede despertar la admiración o hundir en el aburrimiento. En cierto sentido, 'Paycheck' es una versión superficial y monótona de 'Con la muerte en los talones'. El trabajo de John Woo es competente en sus límites." (Manolo Marinero: Diario El Mundo)
 
Lo mejor de todo es el oficio del director, haciendo una película muy efectiva, sin grandes aspavientos, pero que gana con el tiempo por su sencillez y por sus pocas ambiciones. De esas que con el tiempo termina convertida en una pequeña cinta de culto. (Miguel Blanco en Sensacine)

“Paycheck” no es una completa pérdida de tiempo. Su idea central y algunos momentos de su desarrollo resultan de interés, aunque su ejecución general sea simplemente correcta. No llega a aburrir, pero decepciona por sus escasas ambiciones conceptuales y el potencial desaprovechado por productores y director al empeñarse en vestir a la historia de Dick de lo que nunca debió ser: una película de acción. (Manuel Rodríguez Yagüe en Un universo de ciencia ficción)
 
"Comienza con una idea interesante de Philip K. Dick, y el argumento explota su potencial en lo que a acción se refiere, pero realmente nunca llega a desarrollarla. Hay un sinnúmero de posibilidades fascinantes involucradas en la historia, y estoy triste porque las que ocupan el lugar más alto en la mente del realizador son la oportunidad de tener escenas de persecución y hacer explotar cosas realmente buenas." (Roger Ebert)
 
Paycheck es tan mala que puede convencer a algunos cinéfilos de no ir a otra película sólo porque fue dirigida por John Woo. (James Berardinelli)
 
Un pequeño tema para John Woo (...), pero una gran lección de puesta en escena. (Yannick Dahan en Positif)

En Paycheck, Woo paga al contado su ligereza. Llega a un punto en que la caricatura misma desaparece (...) para dejar sitio a un puro producto de serie. (Stéphane Delorme en Cahiers du Cinéma)

A pesar de una excelente idea inicial, una vez más tomada del autor de ciencia ficción Philip K. Dick, la aventura de Paycheck se empantana en la pesadez visual y las inconsistencias del guión. (Stéphane Benaïm en L'Ecran Fantastique)

Película estrenada en España el 23 de enero de 2004.

Reparto: Ben Affleck, Aaron Eckhart, Uma Thurman, Paul Giamatti, Colm Feore, Joe Morton, Ivana Milicevic.


martes, 15 de mayo de 2018

The Magnificent Ambersons (1942). Orson Welles


A finales del siglo XIX, la mansión Amberson es la más fastuosa de Indianápolis. Cuando su dueña, la bellísima Isabel, es humillada públicamente, aunque de forma involuntaria por su pretendiente Eugene Morgan, lo abandona y se casa con el torpe Wilbur Minafer. Su único hijo, el consentido George, crece lleno de arrogancia y prepotencia. Años más tarde, Eugene regresa a la ciudad con su hija Lucy, y George se enamora de ella.

"Maravillosa película, en la que Orson Welles no fue el responsable del montaje final, manipulado por la productora RKO con cortes y añadidos no previstos por el autor. Las imágenes de Welles son tan fascinantes que, aún así, quedó intacta la magia de esta reflexión acerca de la decadencia de la aristocracia, la aparición del progreso en una sociedad anquilosada y la ascensión de una nueva estructura social." (Miguel Ángel Palomo: Diario El País)

Así describe Welles su impresión al ver la versión final de su obra, reducida a los 88 minutos de su metraje definitivo: "Fue muy desagradable. Hubiera sido más feliz sabiendo de oídas sin conocer personalmente lo que habían hecho con ella. Durante cinco o seis rollos las cosas no fueron tan malas. ‘Bien -pensé-, la cosa no está tan mal. No han hecho demasiados estropicios, sólo unos pocos pequeños cortes estúpidos.’ Y entonces se abrió el infierno..." (Ciudadano Welles, Peter Bogdanovich, citado por David Vericat en Cinema esencial)

Una de las ideas en que Welles insistía más en el guión y que se eliminaron del montaje final era el progreso tecnológico que acaba destruyendo y contaminando el entorno. Nadie quería mensajes tecnófobos en los años 40. También se eliminaron detalles sobre las causas exactas que arruinan la familia, de modo que esta subtrama aparece de forma algo precipitada. Peor aún, destruyeron la evolución en el tono de la película que Welles había perfilado con sumo cuidado: esa melancolía inicial en forma de amable nostalgia que se acababa volviendo más amarga hasta oscurecerse, de ese bonito recuerdo de los tiempos pasados al presente oscuro caracterizado por la decadencia de los Amberson y la invasión del automóvil. (El gabinete del doctor Mabuse)

Los Amberson trata de oportunidades perdidas, de lo que pudo ser. Todo está cambiando y cada cambio es señal de que el mundo se aleja irremediablemente de lo que fuimos porque lo que fuimos está fijo en el tiempo. Eugene dice en el baile: “Los viejos tiempos no existen. El pasado está muerto. ¡Sólo hay tiempos nuevos!”, pero ni el resto de los protagonistas –salvo acaso su hija– ni la película misma parecen compartir esa visión optimista. (Alonso Ruvalcaba en Letras libres)

La penetrante, agridulce historia decimonónica de amores imposibles, intensos vínculos familiares (con una hipnótica relación entre tía y sobrino), abolengo y decadencia aristocrática, cambios de época y actitudes, progreso humano y emocional… a la que Welles otorga su abigarrada mirada cinematográfica, está dotada de una complejidad en la composición de escenas, un soberbio uso de la profundidad de campo, un extraordinario manejo narrativo del espacio, una revolucionaria utilización del sonido, una fascinante y expresionista disposición atmosférica, un poderío formal en sus encuadres, un arrebatador dibujo de personajes, una perfecta dirección de actores…. (Antonio Méndez en AlohaCriticón)

Incluso en su forma truncada es increíble y memorable. (Pauline Kael)

Al contar esta historia, vacilante y torpemente, la película va de gravosa a pesada y de aburrida a mala. Tartamudea y tropieza cuando Welles sumerge la historia de Tarkington en un desastre de radio y técnica escénica. (Manny Farber)

El sentido emocional de América a fines del siglo XIX y principios del XX es tan palpable que puedes saborearlo. (Jonathan Rosenbaum)

Debo decir que la prefiero a Citizen Kane (1941). Entonces ya podéis demandarme. (Andrew Sarris)

Incluso con tantos cortes que reducen el tercio final a una mezcla frustrante de segmentos inconexos, retiene su poder ocasional para hipnotizar y sorprender. (James Berardinelli)

Pese a que Welles renegó de un montaje en el que no se le permitió intervenir, este film constituye una apasionante adaptación de la novela de Booth Tarkington. La decadencia económica de la vieja aristocracia americana, suplantada por los nuevos industriales, es el pretexto de un fresco social lleno de significaciones. Su autor adopta una postura ambivalente pero generosa, saludando los nuevos tiempos al mismo tiempo que mira los viejos con nostalgia. (Fotogramas)

Película estrenada en España en octubre de 1944.

Título español: El cuarto mandamiento.

Reparto: Joseph Cotten, Dolores Costello, Anne Baxter, Tim Holt, Agnes Moorehead, Ray Collins, Erskine Sanford, Richard Bennett.




miércoles, 9 de mayo de 2018

Taxi Driver (1976). Martin Scorsese


Para sobrellevar el insomnio crónico que sufre desde su regreso de Vietnam, Travis Bickle (Robert De Niro) trabaja como taxista nocturno en Nueva York. Es un hombre insociable que apenas tiene contacto con los demás, se pasa los días en el cine y vive prendado de Betsy (Cybill Shepherd), una atractiva rubia que trabaja como voluntaria en una campaña política. Pero lo que realmente obsesiona a Travis es comprobar cómo la violencia, la sordidez y la desolación dominan la ciudad. Y un día decide pasar a la acción.

"De Niro se mira al espejo y de un golpe de rabia... queda inaugurado el thriller llamado moderno"  (Luis Martínez: Diario El País)

Taxi Driver es, para el que esto escribe, la mejor película de su director y una cinta clave en el cine de las últimas décadas, por su conjunción de talentos dando lo mejor de sí mismos. Scorsese radiografiando las calles neoyorkinas de los 70, bien ayudado por la cruda fotografía de Michael Chapman; Schrader planteando a la audiencia el dilema moral de situarse al lado del (supuesto) loco, la romántica y apocalíptica banda sonora de Bernard Herrmann o la labor de sus actores, encabezados por un De Niro que crea desde dentro y que pocas veces ha mostrado tanto dolor y desesperación sin caer en los excesos que luego le han hecho objeto de imitaciones y parodias. Dejaremos aparte momentos tan cacareados como el “¿hablas conmigo?” del espejo o el peinado mohawk y mejor nos fijaremos en muchos otros instantes en los que Travis interacciona con otra gente y en su lenguaje corporal deja claro su falta de adaptación al mundo. (David García Gallardo en Miradas de cine)

Sin ninguna duda, la mejor película de Scorsese hasta ese momento, que ganó la Palma de Oro en el Festival de Cannes de 1976 con todos los merecimientos y por aclamación. En una escalada profesional y creativa que hacía olvidar sus complicados inicios, Scorsese se convertía, en ese año, en un director estrella, a la altura de sus más famosos compañeros de generación, prestigio que no le ha abandonado hasta el día de hoy. ‘Taxi Driver’ es una excepcional obra maestra por su extremo riesgo y coherencia estética, porque no busca soluciones fáciles a la violencia ni pretende engatusar al espectador con un salvajismo preciosista, y porque en su negrísimo cinismo se adivina una compasiva percepción del dolor de la soledad. (Adrián Massanet en Espinof)

Scorsese, un católico; y Schrader un calvinista, erigen esta sobrecogedora metáfora de tintes bíblicos (no en vano Scorsese ya había leído por ese tiempo una copia de ‘la ultima tentación de cristo’ de Nikos Kazantzakis y en su juventud estuvo a un paso de dedicarse al sacerdocio) la intención mística es evidente desde los títulos principales, en los que el vehiculo de Bickle aparece de entre el vapor de las alcantarillas como una bestia abriéndose paso por el averno, y si a eso se le suman las melancólicas y cuasi fantasmagóricas notas orquestales de Bernard Herrmann, y a un inusual desenlace, podría decirse que se trata más de una fantasía mortuoria que de la realidad misma. (Pierluigi Puccini en Alohacriticón)

No es «Taxi driver» una película agradable. Excelente producto cinematográfico, con un personaje insólito tratado con originalidad y hondura, no tiene una tesis clara y sí una conclusión ácidamente desagraciable. Porque si el camino para la solución de la soledad es la terrible cirugía de la violencia, de la sangre y las muertes, el mal no tiene remedio. Aunque haya Quien pueda disculpar el resultado por la intención. (Pedro Crespo en ABC)

Taxi Driver es la imagen de una violencia que ahora debe entrar en el mito (aunque solo sea para tranquilizarse). (Pascal Kané en Cahiers du Cinéma)

Scorsese celebra aquí a la ciudad reencontrada con la fascinación mezclada con el espanto de quien revive una pesadilla familiar. (Michael Henry en Positif)

El descenso al infierno de Travis Bickle es realmente sobrecogedor. De Niro también está absolutamente impresionante en esta pintura de la alienación por la soledad y en el retrato de este justiciero de la ciudad, una víctima de  la América de los años 70. (...) Una película eminentemente pesimista que tiende por completo a su mítica escena final. Para ver quizá simplemente por el solo "¿Estás hablando conmigo?". (Mathilde Tellier en aVoir-aLire.com)

[Scorsese] parece necesitar guiones con un humor bien diseñado y artistas con el espíritu de Ellen Burstyn para compensar lo que parece ser una visión fundamentalmente depresiva de la vida y la creencia de que la sobriedad es el equivalente a la seriedad. (Richard Schickel)

Tal vez la película más formalmente deslumbrante, así como la más problemática desde el punto de vista moral e ideológico, dirigida por Martin Scorsese, Taxi Driver de 1976 sigue siendo un hito inquietante por el tipo de doble pensamiento voluptuoso que ayudó a ratificar. (Jonathan Rosenbaum)

Una de las mejores y más poderosas películas de todos los tiempos. (Roger Ebert)

Uno de los films más sórdidos e impactantes de los 70, en el que Scorsese volvió al tema de la soledad, ampliado con diversas implicaciones: desde las secuelas del Vietnam hasta la corrupción barriobajera, pasando por la impermeabilidad de las clases sociales. El protagonista viene a ser el símbolo de una generación que ha participado en la Historia sin llegar a comprenderla. Su ambiguo desenlace no impide que, ante todo, se imponga la fuerza de sus imágenes. (Fotogramas)

Película estrenada en España el 10 de marzo de 1977.

Reparto: Robert De Niro, Cybill Shepherd, Jodie Foster, Albert Brooks, Harvey Keitel, Leonard Harris, Peter Boyle.



viernes, 4 de mayo de 2018

Night Passage (1957). James Neilson


Los trabajadores del ferrocarril no han cobrado su sueldo desde hace meses debido a los atracos de Whitey y su banda, a la que pertenece el peligroso pistolero Utica Kid. La compañía ferroviaria contrata los servicios de Grant (James Stewart) para evitar que continúen los robos.

La película fue una de las primeras rodadas con el sistema Technirama.

Tras rodar cinco espléndidos wésterns en cinco años, el tándem formado por el actor James Stewart y el cineasta Anthony Mann planeó que esta fuese su sexta colaboración. Sin embargo, varias discrepancias entre ellos acabaron por echar a perder esta sociedad y Mann decidió retirarse de un filme que, incluso, había empezado a rodar. Irónicamente, la cinta, acabada por el debutante James Neilson, un artesano mediocre que se pasaría gran parte de la carrera en la pequeña pantalla, resultó un buen producto, aunque no tan memorable como otras cintas de Mann-Stewart como "Colorado Jim" o "El hombre de Laramie". (ABC)

Dos acertados golpes de efecto y algunas secuencias de acción bastante bien rodadas salvan de la quema a un western que abusa del humor socarrón y pulula de unos personajes a otros sin definir ninguno a la perfección. (El Criticón)
 
Empezado a dirigir por Anthony Mann, y rodado por el mismo equipo con que había conseguido films memorables, este western tiene ciertas pretensiones pero unos resultados decididamente menores. Basado en un psicologismo algo elemental, plantea el enfrentamiento entre dos hermanos a ambos lados de la ley. La flojedad de este componente no le impide tener unas secuencias de acción realmente conseguidas. (Fotogramas)

Película estrenada en España el 24 de agosto de 1959.

Título español: La última bala.

Reparto: James Stewart, Audie Murphy, Dan Duryea, Dianne Foster, Elaine Stewart, Brandon De Wilde, Jay C. Flippen.


miércoles, 2 de mayo de 2018

The War Wagon (1967). Burt Kennedy


Taw Jackson, un preso que disfruta de libertad provisional, quiere aprovechar la ocasión para vengarse de Frank Pierce, el hombre que unos años antes, le tendió una trampa que lo condujo a la cárcel. El objetivo de Pierce era quedarse con la finca de Jackson, en la que se había descubierto un filón de oro. Pero Jackson está decidido a desbaratar los planes de su enemigo.

Sin inventar la pólvora, vale su peso en oro aunque sólo sea por ver juntos a John Wayne y Kirk Douglas, que habían coincidido ya en la superior Primera victoria. Sigue el esquema de robo audaz a una diligencia acorazada y pertrechada de ametralladora, para lo cual el recién salido de la cárcel Taw Jackson recluta el equipo perfecto. Junto a un toque de humor, contiene elementos arquetípicos, como la pelea en el saloon, el jovenzuelo inexperto y enamoradizo, los indios... Dirige con oficio el artesano Burt Kennedy, que saca todo el partido al formato Panavision con formidables planos generales. (Decine21)

Western producido en 1967 que combina con acierto elementos propios de las cintas del oeste con las películas cómicas. De hecho, es considerada por algunos críticos especializados como una de las precursoras de las 'buddy movies', cintas que harían furor en el cine estadounidense de los años 80 y que también incorporaban 'gags' cómicos a la trama ambientada en el oeste. Burt Kennedy (''El regreso de los siete magníficos''), uno de los realizadores más notables dentro del género, coge las riendas de la dirección. Pero el mayor aliciente del filme supone el ver juntos en la gran pantalla a los míticos John Wayne y Kirk Douglas. Ambos encabezan el cartel de una cinta plagada de acción, momentos cómicos y brillantes aportaciones de un guión escrito por Clair Huffaker. (El Mundo)

Rodada a finales de los 60, cuando la etapa del western clásico ya había tocado a su fin, el filme está impregnado de un humor jocoso y ligeramente paródico que ayuda a darle al filme un tono entre ligero y luminoso que hace de esta película una delicia de ver, no en vano fue un gran éxito comercial. (El Cultural)

Todo queda, así las cosas, en un western menor, algo intrascendente en gran parte por la dispersión de un entramado demasiado episódico, del que Kennedy no logra exprimir todo el dinamismo que esconden sus entrañas. Vale, pero eso no quita que sea igualmente una más que disfrutable sesión de indios y vaqueros, con momentos de gloria (la pelea del bar, los devaneos de Douglas con el sexo opuesto, su precipitado pero divertido clímax) y suficientes ingredientes como para mitificarla. Como sin duda habrá hecho un tal Tarantino que siempre que puede tira de género, y de ejemplos como este. Entretenida, entrañable, y moderadamente sorprendente. (Carlos Giacometti)

Un western desarrollado en clave de comedia, donde los protagonistas llevarán a cabo el robo de un cargamento de oro con la ayuda de un personaje tan pintoresco como Howard Keel (incombustible desde "Siete novias para siete hermanos" hasta "Dallas") convertido en estrafalario indio. Su sólida construcción resulta excesivamente rígida y su humor se expresa de una manera algo forzada. (Fotogramas)

Película estrenada en España el 1 de noviembre de 1967.

Título español: Ataque al carro blindado.

Reparto: John Wayne, Kirk Douglas, Howard Keel, Robert Walker, Keenan Wynn, Bruce Cabot, Joanna Barnes.