miércoles, 17 de octubre de 2018

Le placard (2001). Francis Veber



Un trabajador de una empresa de preservativos se entera de que va a ser despedido. Aconsejado por un amigo, se hace pasar por homosexual para demandar a la empresa alegando discriminación sexual. Sin embargo, la representación de su nuevo papel sólo le traerá quebraderos de cabeza y dará lugar a más de un malentendido.

Veber filma una de sus comedias simples de humor digerible para el gran público donde no se profundiza en los roles y la identidad sexual. (Eulàlia Iglesias en Sensacine)

El filme, aparentemente ligero y sin trascendencia, trata de la cuestión de lo políticamente correcto, de esa tendencia social hacia un respeto simulado pero que en realidad tiene más que ver con lo económico que con la aceptación real. (La butaca)

Farsa sobre la hipocresía social, que aparentemente tolera las condiciones sexuales distintas a la mayoría, pero que en el fondo guarda hacia ellas el mismo recelo de siempre, la película de Veber no es sólo un brillante ejemplo de comedia de situación, dirigida con soltura y gracia, sino también una llamada a una efectiva asunción y respeto de lo diferente. (Enrique Colmena en Criticalia)

Crítica a través del humor de cierta cultura empresarial. Francis Veber evita juzgar la homosexualidad (quien busque aquí un alegato por la causa, se equivoca), centrándose en cambio en destapar la hipocresía que antaño discriminaba y ahora concede trato de favor. (Decine21)

En Salir del armario, encontramos arreglado inteligentemente, un resumen del cine popular francés de los últimos veinte años. (Patrice Blouin en Cahiers du Cinéma)

Al vivir en los Estados Unidos, Veber se revela (...) en el fondo totalmente desconectado de la realidad de la sociedad francesa. El problema es que él es principalmente un guionista (...). De repente, su mecánica de risa, bien engrasada por otra parte, se vuelve vacía. (Olivier Nicklaus en Les Inrockuptibles)

Reaccionaria, ultraburguesa, la película asume su ingenio cobarde, ocultado sumariamente bajo la máscara de la benevolencia liberal. (Jean-Marc Lalanne en Libération)

La película transcurre con el ritmo dulce de una comedia parlanchina de los años 30. Ni una idea de cine. Hay dos siluetas femeninas para cinco pesos pesados de un elenco masculino típicamente veberiano. (Françoise Audé en Positif)


Lo extraño de la película es que Veber no haya sabido sacar partido a las situaciones equívocas que el argumento plantea y no aproveche ni las posibilidades satíricas, ni se decida por la farsa abiertamente jocosa. (Manuel Quinto en La Vanguardia del 7 de octubre de 2001)

"Realizada con la habilidad de alguien que, como Veber, conoce muy bien los viejos trucos de la comedia (...) Con un buen punto de partida, una parte central más bien lenta y un brillante final. Comedia sin otra pretensión que hacer reír, pero que funciona a la perfección." (Augusto M. Torres: Diario El País)


El talento como guionista cómico de Veber sabe rizar el rizo y eludir el posible maniqueísmo y “homofobismo” de tal premisa, dándole la vuelta y convirtiéndolo en una reflexión sobre cómo han cambiado las cosas (al vecino consejero le despidieron justamente por confesar lo mismo veinte años atrás) y sobre la hipocresía y bestialismo de los usos y costumbres empresariales y humanos. (Javier Cortijo en ABC del 5 de octubre de 2001)
  
En primer término, "Salir del armario" es una comedia agridulce sobre la mirada de los otros; su tema segundo es el crecimiento y la difusión de un rumor. Temas, por cierto, muy shakesperianos, que el maestro ilustró en "Mucho ruido para nada". (...) En la película ni sobra ni se dilata un solo plano; no se pierde en profundidades imprecisas; da mucho más de lo que promete gracias a unos diálogos y unos giros de guión que beben del gran Michel Audiard (¿alguien se acuerda?), y sus actores y actrices vuelan muy alto sin pasarse un pelo. (Marcos Ordóñez en Fotogramas)

Película estrenada en España el 5 de octubre de 2001.

Título español: Salir del armario.

Reparto: Daniel Auteuil, Gérard Depardieu, Thierry Lhermitte, Michèle Laroque, Michel Aumont, Jean Rochefort, Alexandra Vandernoot.


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